Busca la Causa, no trates sólo el Síntoma: Testimonio

Publicado: 19/02/2017 - Actualizado: 20/05/2019

Lo primero que quiero hacer hoy es pediros perdón, porque tengo un montón de testimonios,  todos preciosos, y que me decís cosas maravillosas… pero no puedo ponerlos todos, lo siento… intento seleccionar aquellos que sean distintos unos de otros, porque lo que pretendo con esto es ayudar a que otras mujeres, otros hombres, se puedan sentir identificados, sentirse reflejados… y esto les ayude a tomar conciencia, a ponerse en marcha para recuperar su vida, su salud, encontrar la causa de su malester…

Yo no soy médico, ojo, soy embrióloga, naturópata, especialista en análisis clínicos y experta en medicina ortomolecular, llevo toda mi vida estudiando el cuerpo y la mente humanas, y he aprendido más de la medicina natural que de la alopática… obvio que hay una base innegable bioquímica, que si no fuera bióloga sería difícil conocerla, pero el conjunto de todo hace que se puedan conseguir cosas maravillosas, como en el caso de M.

Yo no pretendo que nadie haga nada que no desea, eso no funciona, solo doy información, solo soy una mera transmisora de información, la decisión SIEMPRE es del hombre o la mujer que tengo delante, nada más.

Os dejo con una caso muy especial, un caso en el que llevamos muy poco tiempo, pero que hemos conseguido cambios espectaculares, y que no, el embarazo no ha llegado, pero que llegará, todo llega en su debido momento, lo que necesitaba M era recuperar su SALUD y su vida, encontrar la causa de sus problemas de salud, antes de quedarse embarazada….

Buscando la causa

Espero que os ayude:

«Querida Toñi:

No hay palabras para agradecerte lo que estás haciendo por mí. Nunca he creído en las casualidades, prefiero pensar que de vez en cuando Dios nos hace regalos maravillosos.

Después de varios tratamientos hormonales nos enfrentamos a dos pérdidas que me dejaron destrozada. Dispuesta a no darme por vencida, encontré tu página de internet después de que dos médicos nos sugirieron un nuevo tratamiento, mucho más agresivo, al que no le vimos ninguna lógica por no estar encaminado a encontrar la causa de las pérdidas. ¿Una bióloga, en España, a miles de kilómetros de nuestra casa y que atiende por Skype? Nos decidimos a aprovechar los avances del siglo XXI y, sobre todo, a intentarlo nuevamente pero de forma más natural, sin la agresión de los tratamientos «convencionales».

Aquí hago un paréntesis y doy algunos detalles para que quien lea, entienda. He padecido diferentes problemas de salud durante los últimos veinticinco años. Nada ha sido del todo grave, pero me han revisado tantos especialistas que ya perdí la cuenta. Jamás encontraron la causa raíz, simplemente me trataron los síntomas de enfermedades aparentemente no relacionadas. Eso sí, me detectaron hipotiroidismo hace veintidós años y me medicaron desde entonces. Los últimos dos años y medio han sido los más complicados, no sólo por las pérdidas, tratamientos y cirugías, sino por dolores en el cuerpo que afectaron mi calidad de vida significativamente.

No voy a negarte que cuando recibí la lista de los treinta y cinco análisis que debía realizarme me quedé pasmada. ¿De verdad hay que hacerlos todos?, pensé. Francamente, empecé cansada tu tratamiento, ya tenía un largo camino recorrido.

En los primeros análisis salió que padezco Hashimoto, una enfermedad autoinmune que afecta a la tiroides. En el fondo, tener este diagnóstico me pareció bien, así podríamos empezar a atacar el problema. Poco a poco fueron llegando más resultados y me causó (hay días que todavía me causa) mucha angustia ver que son varias cosas que también están fuera de rango y que arreglar esto no es tan simple como tomarse una pastilla.

Desde entonces me has derivado con otros profesionales de tu confianza y me has recetado tantos complementos que mi pastillero es más grande que el de mi abuela. He cambiado mi dieta drásticamente y algunos de mis hábitos.

Para no alargarme más, quiero contarte que llevo tres meses y medio con tu tratamiento ¡Y ME SIENTO COMO NUNCA! No tengo los dolores ni los malestares a los que, tristemente, estaba acostumbrándome. Vamos, hasta duermo mejor. Todos los síntomas que llevaba padeciendo por años estuvieron siempre relacionados. Tú me diagnosticaste y me diste el tratamiento adecuado. Esto jamás lo olvidaré y te estaré siempre agradecida.

Y bueno, quien llegó a leer hasta aquí se preguntará: «¿y ya está embarazada?» La respuesta es no y ni lo estamos intentando. Ahora tengo la oportunidad de sanar mi cuerpo (y mi mente, por qué no decirlo). Todavía queda mucho trabajo por hacer para preparar mi cuerpo para albergar vida y finalmente tener a nuestro bebé con nosotros PERO ahora sabemos que ESTAMOS EN EL CAMINO CORRECTO.

Muy querida Toñi, cuando sea el momento confío en que te escribiré dos cartas más. En la primera te contaré que mi embarazo va viento en popa y en la segunda te diré que tenemos con nosotros un bebé sano y precioso, y que sin ti jamás lo hubiéramos logrado.

Recibe todo mi cariño y mi agradecimiento,

Siempre, gracias a ti M!!!!!!!

Acerca del autor
  • Antonia González

    Experta en Medicina Reproductiva, Embrióloga y Andróloga. Licenciada en Biología por la universidad de Alicante. Máster en Reproducción Humana del Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) y la Universidad Rey Juan Carlos. En la Universidad de Alicante también cursó Especialista universitario en Análisis Clínicos. Además, es Graduada en Naturopatía, Medicina Ortomolecular y Técnico superior en Coaching personal. También es Especialista en Meditación Mindfulness por la Universidad Internacional de Valencia. Más información en su Linkedin.